Algunos consejos sobre alimentación saludable
¿Qué debemos comer?
Esta pregunta se la hacen muchísimas personas cuyo objetivo es mejorar su alimentación, pero en este mar de información es complicado encontrar recomendaciones adecuadas. Me voy a centrar en las más genéricas pero que a la vez nos van a resultar fundamentales, son los principales pilares de una alimentación saludable.
Evitar o reducir alimentos «ultraprocesados» o procesados
Estos alimentos son aquellos que nos aportan muchas calorías y pocos nutrientes. Normalmente, suelen tener ingredientes como grasas de mala calidad (aceite de palma, grasas trans…), elevadas cantidades de azúcares añadidos y sal. Algunos ejemplos son: bollería industrial (galletas, «Cereales de desayuno», Donuts…) , carnes procesadas (embutidos como chorizo, jamón, pavo…), bebidas azucaradas (mal llamados «refrescos»), zumos, salsas comerciales, snack tipo «chips».
Para evitar este tipo de alimentos debemos dedicar un momento a revisar la lista de ingredientes, de esta forma no caeremos en el engaño. De todas formas, consumir muchos alimentos con etiqueta es sinónimo de alimentación poco saludable.
Priorizar materias primas
Materias primas se puede entender como productos naturales, pero no me gusta utilizar ese término ya que ha sido «raptado» por la industria alimentaria como estrategia de marketing en sus productos insanos. Dentro de estos productos se incluirían: verduras, hortalizas, frutas, frutos secos, legumbres, cereales integrales, lácteos enteros sin azucarar ni edulcorar, huevos, carnes, pescados y mariscos sin procesar. En definitiva, todas los grupos de alimentos que existen con el liguero matiz de no estar procesado ni en compañía de otros alimentos que no nos interesan.
UN CONSEJO MUY PRÁCTICO PARA NO CONVERTIRNOS EN «DETECTIVES» EN LOS SUPERMERCADOS ES EL DE COMPRAR EN MERCADOS, EN ESTOS COMERCIOS ES MÁS COMPLICADO CAER EN ALIMENTOS INSANOS. NORMALMENTE TODO LO QUE NOS ENCONTRAMOS SUELE SER FRESCO, BARATO Y COMO NO, DE TEMPORADA Y LOCAL (NO HAY QUE OLVIDAR EL IMPACTO MEDIOAMBIENTAL QUE SUPONE EL CONSUMIR CIERTOS PRODUCTOS).
La base de nuestra alimentación debe ser de origen vegetal
Un consejo muy práctico para perder peso y llevar una dieta saludable es el de maximizar el consumo de alimentos de origen vegetal y complementar con los citados en el punto anterior.
Actualmente, los estudios científicos indican que su consumo está relacionado con un menor índice de sobrepeso u obesidad pero no dejan muy claro el por qué. La hipótesis que se baraja es, no que los vegetales sean la panacea, sino que al consumir estos en grandes cantidades estamos desplazando el consumo de otros alimentos superfluos.
Alejarse de aquellos alimentos que prometen mucho pero aportan poco
Me refiero a aquellos alimentos que tienen declaraciones de salud o que hacen referencia a unas supuestas cualidades que poseen: rico en vitaminas y minerales, fuente de omega 3, sin azúcares añadidos, bajo en grasas, 100 x 100 natural…
Normalmente, estos productos suelen tener otros componentes ocultos (no necesariamente todos) que no nos interesan. Por ello, recurren a estas estrategias de marketing cuyo objetivo es hacernos pensar que estamos consumiendo un producto saludable.
No incluyas, sustituye
La gente piensa que hay que introducir más fruta, verduras, productos integrales… en definitiva, alimentos saludables. Pero la realidad es que «es más importante lo que dejas de comer que lo que comes», con esto quiero decir que lo ideal es cambiar aquellos alimentos superfluos por comida real. Sustituir aquellos cereales blancos por integrales, carnes y pescados procesados por frescos, lácteos azucarados o edulcorados por naturales, grasas de mala calidad por un buen aceite de oliva virgen extra, y así sucesivamente con todos los productos insanos que estés consumiendo.
Muévete
Se que no es una pauta dietética, pero no podía faltar. No necesitas ir al mejor gimnasio de tu ciudad ni hacer los mejores o más complejos entrenamientos que hayas visto por Internet, simplemente realiza 30-45 minutos diarios de aquel deporte que más te guste. Es posible que «no tengas tiempo», pero hay muchas alternativas como subir por las escaleras en vez del ascensor, levantarse media hora antes y aparca el coche un poco más lejos del trabajo o si puedes ir a pie mucho mejor, busca 20 minutos al día para entrenar en casa (se puede hacer sin ningún material adicional), en definitiva, ¡Huye de este mundo que nos incita al sobrepeso!
Óscar López
Licenciado en Dietética y Nutrición